martes, 29 de septiembre de 2009

AIRE en MOVIMIENTO

SERGIO: El sol se está poniendo y es claro que algo en el aire quiere hablarme; siento su presencia pero no la identifico bien. Tiene que ver con el mismísimo aire. Es una tarde maravillosa de primavera y con las puertas abiertas, entra el aire aún bastante fresco, aunque lleno de vitalidad.

brisa AIRE: Sí, Sergio, soy el aire. Desde hace algunos días he estado entrando y saliendo de tu cabaña, envolviéndote con mi energía. Ahora finalmente me percibes para recibirme. Sé que has estado con muchas cosas profundas que se les abren a ustedes, par de corazones vivientes.

Como bien dijiste al comienzo, llego cargado de “nuevos aires”; aromas y energías revitalizantes, puras, frescas. Como buen sabueso que eres, me percibes llegando de lejos, del sur, de tierras antárticas, polares. Es que de allí provengo con el mensaje fresco de la esperanza, de la gracia.

Cada uno de los elementos venimos a ustedes, los humanos, con mensajes de despertar. Si tan sólo prestaran un poquito de atención, percibirían que en todo lo que llega a ustedes hay un claro mensaje para recibir.

En este caso, como el aire que soy, quiero comentar de cuánta ayuda les sería recibirme en cada inspiración de manera conciente. Yo los renuevo y mantengo conectados con la vida en la Tierra. La respiración es el acto continuo de confianza en la vida.

Estoy en todo lo que los rodea. Si prestan algo de atención se darán cuenta que todo lo que escuchan llega a ustedes por medio de mí. No hay sonido fuera del aire. Las campanas, los llamadores colgados en las ventanas, el arrullo del agua corriendo, el agitar del follaje en una tarde ventosa, los truenos, el canto de las aves, vuestra propia comunicación con los demás. ¿Se han parado alguna vez a pensarlo? ¿Se fijaron en esto? ¿Cuántas veces han agradecido a la vida por estos regalos que ella les da a través de mí?

Por ser un elemento gaseoso, impalpable fecundo todas las materias que toco, pero de una forma muy sutil, espiritual. Soy el alma invisible de todo ente. Ustedes, los humanos me asocian con las ideas, la comunicación, la búsqueda del bien común y la curiosidad. Pero también con los arranques y giros imprevistos, que manifiesto en ráfagas súbitas, remolinos, tornados y hasta huracanes. Pero hay algo que algunos saben y otros no, por lo que se los recordaré: esas manifestaciones violentas no son más que la respuesta a vuestras emociones sin gobierno, a vuestros pensamientos sin control. Ustedes, como máximos seres creadores, nos gobiernan a nosotros los elementos mediante sus pensamientos, palabras y emociones. Todo lo crean y yo no escapo a vuestra influencia.

Es cierto que según las épocas del año mi presencia es más cálida o más fría, más o menos cargada de humedad, de aroma. Pero no menos cierto también es que vuestro aporte me enriquece con los sonidos de la buena música para el alma, con el aroma del pan recién horneado, con los pensamientos amorosos, los sentimientos de bondad, pureza e inocencia. Todas cualidades que me enriquecen y vivifican. ¿Cuándo se darán cuenta de que soy la clara manifestación de ustedes? En buena medida, según cómo me presente es de acuerdo a la energía que ustedes vierten en mí.

Gracias a que existo, es posible que todo mi ser se cargue con la humedad necesaria que les permite a ustedes jugar con las formas de las nubes, ser bañados por las lluvias o cubiertos por la nieve blanquísima.

El surazo, el pampero o el zonda son aire en movimiento con propio temperamento. Capaces de renovar el aire de regiones completas, o de generar desequilibrios emocionales hasta a los más fuertes. Más allá de mis maneras de presentarme, todo yo soy una clara manifestación de la vitalidad, la renovación y la perpetua abundancia de la vida. Si no que lo digan todas las especies de plantas y animales que de mí dependen para existir, reproducirse y expandirse.

Cada respiración conciente es un claro paso hacia la propia soberanía, estando en el presente continuo que no deja de crear. Estar presentes es estar en mí, es ponerme atención al inspirar y espirar porque esos movimientos son la constante del eterno presente.

Sergio, gracias por darme la palabra y comunicar estas reflexiones con los demás, a cada una y cada uno mi soplo de vida les dejo.

sábado, 26 de septiembre de 2009

LEYENDO NATURALEZA, parte 7

Azton y la Hormiga wendeunk@yahoo.com.ar

ant Hola, soy la Hormiga, y junto con Azton vamos a entregarles un conocimiento básico acerca de la vida natural y cómo leerla para que ustedes, los humanos, puedan beneficiarse más aún de lo que ella tiene para darles. En este caso se trata de leer, de aprender a conocerla más en la intimidad.

Nos ha parecido bien armar una serie de escritos para que ustedes puedan ir paso a paso, involucrándose en ella, a través de nosotros, los animales.

En esta séptima parte les brindamos los fundamentos de los animales totémicos según sea el tipo; ¿nos acompañan?

Ahondando en el significado del tótem de los animales acuáticos


Los tótem de animales acuáticos son tan vastos en significado como el mar en sí mismo.

El agua es un símbolo poderoso de por sí. Simboliza purificación, libertad y movimiento. Es más, el agua es un símbolo universal del inconciente.

Por lo tanto, los tótem de animales acuáticos nos ayudan a revelar e identificar nuestros pensamientos escondidos o acciones asociadas a ellos. Cuando esas criaturas encuentran la manera de entrar en nuestras vidas, ellas necesitan ser honradas y aceptadas. Si prestamos atención, nos ayudarán a identificar nuestras motivaciones ocultas –motivaciones que no son muy saludables para nosotros. Aún mejor, observando y estando abiertos a nuestro animal acuático, aprendemos la vía más simple para acceder a los pensamientos positivos, y de esta forma reemplazar a los negativos.

Las criaturas del agua son invariablemente brillantes y juguetonas. Viviendo en la libertad que el símbolo del agua encarna –el tótem de los animales acuáticos nos recuerda vivir con esa misma libertad desenfrenada. Haríamos bien siguiendo el ejemplo de estas criaturas, y vivir como si no tuviéramos límites.

Si has identificado uno de tus animales totémicos del mundo del agua, estás por comenzar un viaje maravilloso, por lo que te animo a descubrir más acerca de las criaturas del agua.

Animales totémicos del aire: Remontando el vuelo hacia el entendimiento de los animales totémicos del aire

Como versa en sus descripciones, los animales totémicos del aire tienen inclinación por asistirnos en asuntos referidos al conocimiento más elevado. El aire es el más etéreo de los elementos, se comprende que las criaturas que viven en él son las llamadas a brindar el más claro entendimiento acerca de este elemento invisible. Cercanos a los cielos celestiales, los animales del aire son nuestros mejores aliados al proclamar nuestras rogativas a los dioses en los cielos.

Los animales totémicos del aire también son símbolos de fuerza física y mental, así como de soberanía. Rasgos muy importantes, particularmente cuando estamos experimentando nuevas transiciones, o ambientes en nuestras vidas.

Si los animales totémicos del aire han captado tu atención, deberías sentirte muy animado por su presencia. Deja a su espíritu estimular o impulsar tu confianza, y te recuerden que el poder central está en este presente inadvertido. Los animales del aire son portadores de buenos augurios, y su aparición simboliza un guiño de Dios.

Animales totémicos de la tierra: Fundamentos de los animales totémicos de la tierra y sus significados

Muchas culturas, incluidas las de los nativos americanos, creen que si apoyamos nuestra oreja sobre el suelo, podremos escuchar el latido del corazón de Madre Tierra. Los animales totémicos de la tierra con entusiasmo son concientes de esto –y de hecho, se dice que caminan al ritmo de los latidos de Madre Tierra.
Consecuentemente los significados de estos animales están relacionados a la intuición, la conciencia y el conocimiento. Por último, este grupo de animales representa el estar enraizado y estable tanto mental como físicamente.

Los insectos como Animales totémicos: El zumbido del significado de los insectos como animales totémicos

Todos los animales totémicos insectos apuntan hacia unas pocas características clave: tenacidad, paciencia y reserva.

Según parece inconcientes de su entorno mientras se encuentran ocupados en sus menesteres, el significado de los animales totémicos insecto anuncia la importancia de atender a nuestros propios asuntos. De hecho, al mismo tiempo, muchos insectos tienen un gran sentido de comunidad. El secreto está en mantener el balance, y los animales totémicos insecto ciertamente lo hacen.

Los insectos son progresistas, y proactivos, siempre adaptándose al entorno, y nunca dejando que pequeños asuntos como los desastres naturales se interpongan en su camino de progreso. Cuando nos sentimos descorazonados, podemos aprender una o dos cosas de estos animales totémicos. Es su naturaleza inquebrantable que nos remite a mantenernos en movimiento hacia delante para mejorar y progresar.

Los reptiles como animales totémicos: Los hechos de “sangre fría” de los reptiles como animales totémicos

Los tótem de los animales reptiles son especiales debidos a su naturaleza de sangre fría. El fenómeno del cambio de temperatura de los reptiles según el ambiente, hace de ellos el símbolo supremo de la adaptabilidad. Así como en muchos reptiles las funciones corporales dependen de su temperatura corporal, eso hace de ellos dependientes de su entorno también. Por eso, los reptiles nunca son esclavos de las condiciones externas. Esto es porque son súper intuitivos, y fieramente independientes.

Si entraste en contacto con su tótem, sintoniza con el mensaje que están tratando de darte. Con frecuencia, el mensaje revela sugerencias sobre acordar con las dificultades (adaptación), y hacerlo sensatamente, mientras sostienes tu integridad. También, el menaje puede estar relacionado con la independencia –recordándote no ser esclavo de tus condiciones externas- y realizar los cambios internos que te permitirán ser libre.

Bien, mis queridos amigos, creo que por ahora podemos dejarlo aquí, para que ustedes vayan incursionando en estos aspectos y puedan realmente sentir la energía de nosotros los animales. Nos encontramos en la próxima; saludos de la Hormiga y Azton.

viernes, 25 de septiembre de 2009

LOS GRILLOS

SERGIO: Hace ya días que me encuentro con grillos por todos lados dentro de la casa. Pero hoy ya fue más allá; vino a mi encuentro a conversar y ponerme al tanto de tu energía como animal espiritual. Lo comparto con ustedes, pues tal vez se sientan atraídos a su mensaje y resulte ser vuestra medicina animal.

GRILLO: Nosotros los grillos somos los que comemos desperdicios,  plantas vivas y hojas caídas. Vivimos bajo rocas, troncos, praderas, pastizales, junto a los caminos y hasta dentro de las casas, como en lo de Sergio. Debido a nuestra actividad nocturna, los mitos ancestrales nos asocian con energías lunares de intuición y sensibilidad. Cuando esta energía es plenamente desarrollada en la persona, la lógica se equilibra con la intuición. Cuando no lo está, el grillo individuo toma todo lo que le sucede a su alrededor muy a pecho, lo que lo pone en un lugar de víctima de las circunstancias. Le sigue la discordia emocional. Si esto es así, debe tirar hacia sí su campo de energía y hacer algún tipo de ejercicio aeróbico; lo recomiendo grandemente. Eso le ayudará a fortalecer su centro emocional y enraizar su cuerpo físico.

Conocidos como los músicos de la naturaleza, a los grillos se nos puede escuchar chirriando con fuerza, especialmente durante el período del cortejo. Ese sonido lo logramos frotando nuestras dos alas frontales. Los grillos no sólo nos juntamos al unísono con otros machos tratando de hacer el sonido más fuerte posible, sino que también usamos nuestro ingenio para encontrar pareja.

De nosotros pueden aprender cómo tener recursos y usar el propio ingenio para lograr el resultado deseado. Además servimos como barómetro del tiempo meteorológico. Como buenos artrópodos –como ustedes suelen nombrarnos-, no poseemos regulación interna de la temperatura corporal. A medida que la temperatura ambiente aumenta, también lo hace nuestro metabolismo y comportamiento. ¿Cómo pueden ustedes saberlo? Pues porque el  sonido se hace más rápido según más cálida sea la temperatura ambiente. Cuando al unísono nos callamos la boca, por decir, o sea que detenemos el sonido que hacemos con las alas, significa que se aproxima una tormenta. Aquellos de ustedes con esta medicina deberían prestar atención a las advertencias de nosotros los grillos. Las tormentas son simbólicas y pueden indicar que se les acerca un desafío emocional, mental o físico.

Si han prestado atención, aparecemos en las casas a fines del invierno, por lo que cuando nos vean, sepan que la primavera ya está llegando y que los días se han vuelto notoriamente más largos. Somos mensajeros del calor, la luz y la vida.

Nuestras patas traseras están modificadas para saltar. Lo hacemos sobre situaciones difíciles sin esfuerzo y siempre eligiendo aterrizar en un ambiente más placentero. Si ustedes quieren, podemos enseñarles cómo hacer lo mismo. Somos un aliado poderoso que encarnamos las cualidades de la fe y confianza también. Todo lo que necesitan hacer es seguir nuestra guía.

jueves, 24 de septiembre de 2009

ARROYITO DE CASA

ARROYITO DE CASA

SERGIO, 24 de septiembre de 2009

SERGIO: Querido arroyito que corres junto a la casa donde vivo, quiero invitarte a vengas a charlar un rato conmigo. Siento que tienes algo para compartir. ¿Tienes un momento para dialogar?

ARROYITO: Sí, Sergio, claro que lo tengo. Hace varios años que tú me invitaste a correr y cantar en tu corazón, que has sido el primer humano que ha puesto su corazón en mí. Con todo mi amor canto cada día en ese enorme corazón que tienes. Hoy tengo el honor y orgullo de poder hablar contigo.

Este arroyito que nace, que soy yo, de las entrañas arriba en lo alto de esta montaña, y tú que vives a mi costado, en el fondo del valle, tenemos una gran similitud. Si me lo permites, me gustaría comentarte cómo es.

SERGIO: Sí, arroyito, tu cantar es sabio, tu cantar trae frescura.

ARROYITO: Hace como dos o tres días a hoy, has estado, Sergio, pidiéndome que no me vaya antes de que llegue tu bella princesa; ese P9160065 amor tan divino que has invitado a compartir contigo en tu casa.

Sabes, nada me gustaría más, pero también es cierto, también es cierto, que día a día, como tú lo notas, estoy mermando, estoy haciéndome más pequeño, menos caudaloso y sí, estoy en franca retirada.

Es curioso que esto suceda así a los ojos de ustedes, los humanos. Pues que así sea es parte de los pulsos vitales, de los pulsos de la vida. Es como la sangre que bombea en tu corazón, que en un momento fluye con toda la fuerza, y hay un instante en que se detiene para luego volver a moverse. Esos pulsos son la vida, esos pulsos te van indicando los momentos de andar y de detenerte, de respirar hondo, mantener el aire y liberarlo. Cada uno de esos pulsos integra al ser que cada uno es.

Yo puedo ser todo lo caudaloso, impetuoso y fuerte que suelo ser cuando el agua abunda en mí. Hecho que te ha llevado a tener que reparar todo un cerco que yo arrasé. Que nada que se interponga a lo que es, puede durar demasiado.

Ese cerco que he roto, simplemente te reflejó, te ayudé a ver que tú mismo habías volteado el cerco interior. Porque en la vida no existen los cercos, solamente existe la verdad. La verdad es una sola vista con los ojos de cada uno que lo habitan. Pero esa verdad, aunque tenga muchas facetas, sigue siendo una. En cada momento, en cada pulso, en cada avance se da ese paso hacia la integración de todos los aspectos que hacen a la verdad.

Yo estoy aquí, como me ves hoy, en esta tarde de primavera, corriendo, cantando, feliz, alegre, pleno, bajando entre las raíces de los coihues, saltando de una raíz a otra, formando pozones, desbordándome de alegría, en busca de un río más grande adonde entregarme. Pero si no lo encuentro, está la madre, está la Tierra, a la que embebo con toda mi vitalidad. Sé que en algún momento volveré a la naciente, nuevamente al comienzo.

Esa es la enseñanza que llevamos todos los arroyos, todos los ríos, todas las corrientes de agua, porque representamos la emoción, ese sentir que va corriendo. Puede ser impetuoso o suave, pero siempre se va moviendo, siempre avanza. Busca entregarse plenamente una y otro vez, entregarse a otro. No se traza un camino a sí mismo; ni yo he trazado mi recorrido, sino que me he dejado llevar por los espacios de menor resistencia. Esa es la enseñanza: el agua que yo soy jamás busca superar resistencias, lo único que hace el agua que me compone, es buscar el espacio de menor resistencia. Por eso es tan cómico verlos a ustedes tantas veces tratando de mantener un control en lo que les es imposible controlar; van poniendo tapones en las fisuras, cuando las fisuras los llevan a la libertad, a ver la verdad. Se pasan la vida taponando la verdad, cuando les sería más fácil hacer como hago yo, que me dejo llevar por la pendiente y busco seguir avanzando por el espacio de menor resistencia, abrazando lo que llega. Yo no sé cuándo viene la siguiente curva, qué obstáculo voy a encontrar, si tengo que dar un salto enorme o uno pequeño, si voy a quedar en un remanso, si me voy a meter en un meandro. Tampoco sé si voy a terminar yaciendo dentro de un río mayor, pero sí sé, no importa dónde quede, que volveré a la fuente, que volveré al lugar de donde provine.

Esta es mi pequeña reflexión que yo quiero compartir contigo hoy y que puede llegarles a aquellos que quieran leerla, porque en este bajar, en esta andar, voy cantando a cada pedacito de suelo que embebo; canto en cada roca que encuentro, canto en el salto entre raíces, canto porque estoy vivo, canto porque soy libre. Tú y todos los demás humanos también lo son, pero se resisten, ponen resistencias a quienes verdaderamente son. Son, al igual que yo, una parte del Todo, que andamos, que tenemos experiencias, pero que volvemos, aunque pareciera que cada vez nos alejamos más, en realidad estamos todo el tiempo regresando a donde provenimos.

Sergio, sigue como hasta ahora, que ya has roto el cerco, vienes andando. Hay una luz muy fuerte que te indica el encuentro con esa otra gota que al fusionarse son esa totalidad quienes son; los seres que ponen en el corazón la verdad de todo lo que es.

Quien vive en el corazón es un ser sagrado, y esta Tierra está llamada a ser pisada únicamente por seres sagrados, únicamente pro quienes viven en el corazón.

Pido también, mientras sigo bajando entre curvas, meandros, caídas y remansos, pido también a cada uno de ustedes que abra el cerco, que se deje llevar. Dejen de poner tanta energía en tapar fisuras, porque ellas están justamente para hacerlos libres.

Gracias Sergio, por darme este espacio, gracias por invitarme a cantar en corazón y gracias por compartir esto con aquellos que como tú, están dejando los cercos atrás.

sábado, 19 de septiembre de 2009

LA PRIMAVERA

Sergio y Antonio, 19 de septiembre de 2009

SERGIO: Desde hace unos días está rondándome la obra de Vivaldi dedicada a la primavera. A escasos días de su arribo a tierras del Hemisferio Sur, qué mejor homenaje que con música e imágenes alusivas. En ese sentido, se me ocurre convocarlo a él para que nos cuente acerca de su composición, ya que Vivaldi fue uno de los mayores innovadores musicales del barroco.

VIVALDI: Fui popularmente conocido como el Prete Rosso o cura pelirrojo, aunque no ejercí como tal. Mi amor por la música llenó mi vida con tal pasión que poco podía importarme la actividad eclesiástica. El hecho de ser cura supuso para mí una ayuda pues me permitió avocarme a la actividad musical toda mi vida. Hoy no sé si lo hubiera podido hacer de otro modo.

Lo que quiero compartir con ustedes corresponde a la porción de la obra “Il cimento dell’armonia e dell’inventione”, más conocida como “Las Cuatro estaciones”; (traducido al castellano sería algo así como “El combate entre la armonía y la invención”). Curiosamente, el nombre que le di a la obra no hace referencia en nada a las estaciones, aunque me inspiré en ellas. Le puse así porque rompe con el paradigma del Concerto Solli, donde el instrumento solista lleva todo el peso melódico y compositivo, quedando el resto de la orquesta limitada al acompañamiento, según la armonía.

Pero en este caso, la obra en cuestión es un concierto para violín donde la orquesta no actúa como acompañamiento, sino como relieve: ayuda al desarrollo de la obra.

Las estaciones, de por sí, encierran un especial valor musical porque es variedad en la unidad. Aunque ahora pueda parecerles a ustedes como una obra clásica, en mi tiempo se la tildó de atrevidísima y simplista con imitaciones de sonidos de la naturaleza. Recuerdo que en ella plasmé sonidos de pájaros, disparos de escopetas cazadoras, truenos y otras cositas que luego contaré cuando les comparta cada una de las tres partes que compone esta porción de las estaciones; la primavera. Pero no lo demoremos más, déjenme acompañarles con una breve reseña de lo que me dispuse realizar. Sergio va a ubicar aquí mismo la música para que puedan seguirme. Me gusta esto de compartirlo con ustedes.

Esta obra tiene tres partes o movimientos; el primero y el último con ritmo rápido y alegre, mientras que el del medio es más reposado e invita a la ensoñación.

Comienza con la llegada de la Primavera, a través de tres compases muy sonrientes. Se hace eco el solista acompañado por violines que imitan el canto de pájaros llamando a sus compañeras. Surgen ondulantes tonos que evocan el agua brotando libremente ya. Pero también súbita actividad debido al asomar de aires de tormenta.

A continuación, en su segundo movimiento, como ya dije apocado y lírico, hay que imaginarse en la pradera, a la sombra de una gran fronda, a un pastor durmiendo la siesta. Si ponen atención, se darán cuenta de la insistente presencia de un perro ladrando. En mis escritos, indiqué que se tocara “sempre forte y strapatto”, para imitar su ladrido persistente y molesto. Se logra ese efecto con dos notas repetidas (do-do; sol-sol)

Finalmente vuelve la actividad, la alegría. En el campo, bajo el sol, tanto pastores como hadas danzan felices por la llegada de la primavera. Todas las cuerdas acceden a figuras iguales, pero las cuerdas graves son las que sostienen notas largas y prolongadas.


Tal vez me haya excedido en lo técnico, más ha sido para ayudarles a comprender lo que el corazón disfruta. Toda composición inspirada desde el corazón canta a la Creación, canta a la Vida. Sean perceptivos con las sensaciones y sentires que se les despiertan al escuchar esta obra; ahí está la clave. Cada uno y cada una de ustedes tendrá imágenes distintas con la misma música, pues son únicos y únicas, con sus luces y sus sombras, con sus vivencias que han hecho de ustedes quienes son.

Esto que les digo viene a cuento con lo que la obra musical demuestra: la diversidad en la unidad. La unidad está compuesta por muchas cosas diferentes, pero esas diferencias son las que la componen y le dan la impronta de lo único, sin igual. Invito a cada una y cada uno de ustedes a verse en el reflejo de la unidad única que ayudan a componer y sostener.

Si Sergio está de acuerdo, me encantaría ser invitado a contarles, en cada nueva estación que llegue a sus tierras, los matices de las otras tres estaciones musicales que compuse, ese encuentro entre la armonía y la invención que cada uno somos en sí mismos.

SERGIO: Antonio, ya me comprometo a convocarte para cada estación siguiente. Cada vez quedo más asombrado de cómo la Vida se las ingenia para recordarnos su unidad en la diversidad, que es también la nuestra.

jueves, 17 de septiembre de 2009

FÓSFORO USADO

SERGIO: Tomé un fósforo ya usado, sin una razón aparente, y mientras lo observaba detenidamente, sentí que me quería decir algo.

FÓSFORO: Sergio, haces bien en prestarle mayor atención a lo que está junto a ti. Soy un fósforo quemado; como me ves, tengo el extraño aspecto de un palito de madera, con su cabecita negra, tiznada, y con una coleta muy fina, cayéndome por detrás. Siénteme, por favor.

SERGIO: Percibo a la vida en ti. Hay sensaciones de luz y de frescas noches; de lluvias ligeras y tórrido calor. También miedo, separación y frialdad interior.

FÓSFORO: matchburningwoodNo te quedes con lo primero que percibes de mí; ve más allá de las sensaciones, más allá.

SERGIO: Siento paz, una diáfana serenidad, la alegría del servicio y la sensación de la pérdida. Son encontradas, pero de alguna manera se integran, conviven en su esencia. Es más, percibo mi propia impronta de gratitud por el servicio que me brindó al encenderlo para iniciar la preparación de mi comida. Gracias, fósforo.

FÓSFORO: Déjame a un lado, Sergio. Cierra los ojos y busca en ti, bucea en ti, sumérgete en ti, en el canto de tu propia esencia y desde allí, búscame. Búscame pues estoy en ti. Soy tú mismo, pues me has convocado para dar servicio y gustoso lo he hecho, gustoso he acudido al llamado. Me has honrado al encenderme y ahora yo te honro al agradecerte por la conciencia que sostienes en la búsqueda de la unión, eterna unión. Cada parte que compone tu experiencia está ahí para ayudarte a crecer. Eres santo y te honro. Vivir en conciencia supone vivir el presente, vivir en el ahora, en una danza eterna donde cada experiencia se enlaza con quien eres, recordándote, recordándote, recordándote…

Me has hecho sagrado al ponerme en conciencia, porque soy la Conciencia de Todo Lo Que Es, en la forma de un fósforo quemado.

Llora, sí, llora en el reconocimiento de quien eres, en el recuerdo que te ayuda a ser aún más conciente, aún más presente, aún más viviente.

Sergio, gracias por escucharte, por honrarte, por ser.

domingo, 13 de septiembre de 2009

LEYENDO LA NATURALEZA, parte 6

Azton y la Hormiga wendeunk@yahoo.com.ar

ant Hola, soy la Hormiga, y junto con Azton vamos a entregarles un conocimiento básico acerca de la vida natural y cómo leerla para que ustedes, los humanos, puedan beneficiarse más aún de lo que ella tiene para darles. En este caso se trata de leer, de aprender a conocerla más en la intimidad.

Nos ha parecido bien armar una serie de escritos para que ustedes puedan ir paso a paso, involucrándose en ella, a través de nosotros, los animales.

En esta sexta parte les brindamos los fundamentos del tótem animal que vibra con cada uno de ustedes; ¿nos acompañan?

TRABAJANDO TU TÓTEM ESPIRITUAL ANIMAL

La guía del espíritu de los animales o tótem puede verse de diferentes maneras, de acuerdo a cada uno de nosotros como individuos. El principio básico de la guía del espíritu animal corresponde al de un determinado animal que nos pone en contacto con nosotros mismos. Un guiño de los poderes divinos que tenemos a disposición, y que pueden trascendernos a un lugar de sanación para nosotros y otras personas.

El animal de poder puede definirse como un objeto natural, animal o ser viviente cuya energía y manifestación tú la sientes asociada a ti durante tu vida. Un tótem puede ser un poder, también llamado “medicina”, que es capaz de transitar nuestro sendero vital con nosotros en nuestro viaje personal y espiritual en esta vida. Podemos acceder a la energía del poder animal para obtener fuerza y sanarnos a nosotros mismos y a otros. En un nivel más alto, estando a solas con los guías espirituales es posible que transformen sus cuerpos de energía en animales, enviándonos importantes mensajes que nos guiarán y enseñarán lo qué necesitamos saber.

¿Alguna vez no te has sentido atraído a determinados animales a lo largo de tu vida? Juntar sus figuritas, colgar fotos de ellos, ir a verlos en un zoológico, o por medio de un especial de la televisión. Alguna vez también te habrá pasado, como a mí, de ver un animal en particular en un lugar que no te lo esperabas y a la vez pensar “¿qué hace este bicho aquí?”. Muchos de nosotros no prestamos atención y perdemos el regalo que los animales nos hacen cuando nos hablan. Debido a la vida desenfrenada y escasa de tiempo en que nos sumergimos a diario, no prestamos atención a nuestro entorno y apenas si notamos la presencia de los seres vivos que nos envía el espíritu; es más ni siquiera nos damos cuenta de su paso por nuestras vidas.

Si nos tomamos el tiempo y hacemos el esfuerzo de conectarnos con Madre Tierra y sus animales podemos aprender a obtener la medicina que viene con esas maravillosas y talentosas criaturas de la naturaleza, iluminando nuestra percepción, creciendo personal y espiritualmente como personas, y compartiendo esta nueva fuente de energía con otros en este maravillo mundo.

Nuestro espíritu animal nos guía de acuerdo a lo que es necesario para nuestro crecimiento, en un momento determinado. Podemos tener un animal principal que nos comprende en esencia. Ese animal muchas veces puede ser con el que te has sentido más fuertemente conectado a lo largo de tu vida, pero también es cierto que puede no serlo. Relaciónate con tu animal de poder. Estudia su comportamiento, hábitos de alimentación, instintos, sus ciclos naturales y de qué manera vive. Agradéceles teniendo cerca de ti objetos que lo recuerden, como figuras, fotos, dibujos hechos por ti, y objetos asociados a él. Aunque no exista ese animal en el área donde vives, igualmente lo puedes tener presente de las maneras que te mencioné. Medita y calma tu mente llamándola al silencio, pídele al espíritu de tu animal la ayuda que necesitas y verás qué fácilmente viene a ti.

Todo está íntimamente conectado en la naturaleza… cada uno tenemos un lugar y un propósito. Tal vez quieras estudiar el lugar donde vive tu animal de poder, cerca de plantas, arroyos, lagos, rocas, acantilados, árboles, etc… Haciéndolo mantienes el balance sagrado de todas las cosas, aprendiendo todo lo que tenga que ver con tu tótem. Has un esfuerzo para comunicarte con los animales. Pon atención a tu alrededor y averigua quiénes te están hablando. Estarás en tu camino conectándote con tu tótem animal, siguiendo estos simples consejos.

¿Dónde vive el animal?

Explorando dónde vive tu animal totémico puede enseñarte mucho. Por ejemplo: un puma podría enseñarte acerca de dar pasos seguros mientras viajas, alcanzando nuevas alturas.

¿Cuáles son sus hábitos?

¿Es nocturno?, ¿Hiberna?, ¿Se lo ve más en ciertas estaciones del año?, ¿De qué manera ves reflejados sus hábitos en los tuyos?

¿Qué aspecto tiene?

¿Qué te sugieren su color y forma?, por ejemplo: ¿su brillo dorado te sugiere el sol, o los destellos de rojo dan la idea de peligro o coraje o enojo?

El flamenco puede darte una aproximación. Su color rosado intenso casi rojo de sus plumas proviene de los crustáceos que come. Sin esa alimentación apropiada, el flamenco pierde totalmente su coloración, tornándose blanca. Esto ayuda a comprender que hay que alimentarse y cuidar de uno mismo apropiadamente, de lo contrario no “brillaremos” ni podremos expresarnos de manera totalmente auténtica.

¿Cómo se defiende?

¿Tu animal de poder se esconde o se mimetiza a sí mismo? ¿Se defiende del peligro? ¿Qué te enseña acerca de cómo lidiar con los conflictos que se te presentan en la vida?

¿De qué se alimenta y cómo lo consigue?

¿Caza solo o en grupo? ¿Atrae a su presa o la ataca? ¿Le gustan los alimentos dulces? ¿Cómo relacionas esos datos con tu experiencia vital? ¿Eres un jugador de equipo o prefieres arreglártelas solo? ¿Vas detrás de lo que quieres, o te sientas a esperar a que las cosas sucedan? ¿Buscas lo dulce de la vida?

¿Cuáles son sus hábitos de pareja y cómo se las arregla con sus crías?
¿Vive en pareja toda la vida? ¿Vive solo o en grupo? Sus crías ¿son alimentadas y cuidadas por años, o las deja solas para que se defiendan y alimenten cuando son muy pequeñas? ¿Alguna de estas respuestas te resuena con cosas que has vivido?

¿Qué puedo aprender de los mitos, leyendas, historias y folclore?
Explora fábulas, mitos y leyendas de varias culturas que se correspondan con la guía de tu espíritu animal.

En el caso del pelícano, existía la creencia de que amamantaba a sus crías con sangre que manaba de su largo pico. Por eso puede ser el símbolo de piedad y auto-sacrificio, así como también un modelo de madre solícita. Explorando los atributos del pelícano se puede estar más atento-a hacia la tendencia de cuidar a otros, muchas veces olvidándonos de nosotros mismos.

¿Cuáles son los aspectos positivos y negativos de este animal?
Cualquier energía dentro de nuestro patrón vital puede expresarse en nuestra vida de manera saludable, animando nuestro desarrollo. De la misma forma, cualquier energía puede también hacerlo de una forma no positiva para nosotros, y puede retrasar nuestro crecimiento. Puedes desear explorar cómo los atributos de tus animales totémicos se manifiestan en tu vida cuando hay equilibrio, y cómo cuando esa energía está desequilibrada.

Por ejemplo, la abeja es industriosa e ingeniosa, y nos recuerda que podemos alcanzar todo lo que pongamos en mente (¡nada es imposible!). De todos modos tenemos que ser cuidadosos de no caer en el sistema de creencias que dice que sólo puedo conseguirlo con sacrificio y duro trabajo. Necesitamos tener cuidado de no vivir la vida manifestando situaciones en las que tengamos que trabajar duramente antes de alcanzar los resultados deseados.

Verdaderamente te animo a que te sumerjas en la búsqueda de tus compañeros animales. Invirtiendo tiempo en averiguar cuáles son tus animales totémicos aprenderás más acerca de ti mismo-a, y del mundo que te rodea.

Bien, mis queridos amigos, creo que por ahora podemos dejarlo aquí, para que ustedes vayan incursionando en estos aspectos y puedan realmente sentir la energía de nosotros los animales. Nos encontramos en la próxima; saludos de la Hormiga y Azton.

martes, 8 de septiembre de 2009

LEYENDO LA NATURALEZA, parte 5

Azton y la Hormiga wendeunk@yahoo.com.ar

Hola, soy la Hormiga, y junto con Azton vamos a entregarles un conocimiento básico acerca de la vida natural y cómo leerla para que ustedeclip_image002s, los humanos, puedan beneficiarse más aún de lo que ella tiene para darles. En este caso se trata de leer, de aprender a conocerla más en la intimidad.

Nos ha parecido bien armar una serie de escritos para que ustedes puedan ir paso a paso, involucrándose en ella, a través de nosotros, los animales.

En esta quinta parte les brindo los fundamentos del tótem animal que vibra con cada uno de ustedes; ¿nos acompañan?

DESCUBRIENDO Y TRABAJANDO TU TÓTEM ESPIRITUAL ANIMAL

Mediante sueños y meditaciones

Trabajar con nuestro animal simbólico o totémico (los términos son sinónimos), es un proceso que nos ayudará en nuestro auto-descubrimiento, y también nos enseñará sobre la vida y el mundo que nos rodea.

El espíritu animal muchas veces se nos revela a nosotros por medio de nuestro subconsciente durante el sueño y la meditación. En esos momentos, los animales nos indican información valiosa sobre nuestro pasado, presente y futuro, así como también nos ayudan en situaciones que estamos atravesando ahora.

Los animales también se nos presentan para identificarse ellos mismos como nuestra guía espiritual, y por lo tanto nuestro animal totémico. Esto requiere de nosotros prestar atención, y aprender más sobre lo que este animal representa, y así poder trabajar con él.

Los animales tienen un agudo sentido del propósito e instinto. Estas son características valiosas de las que podemos aprender acudiendo a su guía, y observando su comportamiento en nuestros sueños y meditaciones.

La meditación es simplemente un estado de sueño conciente, por lo que puedes usar los siguientes pasos para ayudarte a identificar tu animal:

1. Comienza con un diario de tu tótem animal. Te sugiero tenerlo junto a la cama o en el sector donde medites. Esto es porque querrás registrar tus experiencias una vez de regreso de tu caminata matinal o al retornar de una meditación profunda.

2. Ve a dormir o meditar más o menos a la misma hora del día o de la noche, cada día o noche. Tu mente subconsciente es una criatura de hábito. A medida que te introduzcas en la rutina, te será más fácil relajarte, y el símbolo de tu animal llegará con más facilidad.

3. Asegúrate que tu entorno te conduzca a la relajación. Es difícil encontrar a nuestro tótem animal cuando dejamos la TV encendida, o si la habitación es un caos. El subconsciente ama el orden, y será más cooperativo si no hay distracciones ni desorden a tu alrededor a la hora de dormir o meditar.

4. Comienza tu sueño o sesión de meditación estableciendo la intención de identificar tu tótem animal. Debes dar una clara directiva a tu mente subconsciente y a tu espíritu, y el mundo espiritual del animal sabrá que te quieres comunicar con él. Hablándote silenciosamente a ti mismo, repetí tu intención de encontrarte con el espíritu de tu animal durante tus sueños. Puedes usar la siguiente frase, o bien inventar la tuya propia:

"En este momento, recibo la visión del animal. En este momento, el espíritu de mi animal toma vuelo revelándome lo que debo ver. En este momento, el tótem de mi animal se conecta conmigo amorosamente”.

Repitiendo esta frase o una invocación similar, persuadirás a tu ego y a tu mente ordinaria a que se relajen, mientras tu espíritu e intuición comienzan a expandirse para alcanzar el contacto con tu tótem animal. Eventualmente te encontrarás a ti dejándote llevar hacia el sueño (o el estado alfa de meditación). Relájate y déjate llevar por él, tu tótem animal está listo para presentarse ante ti.

5. Ya sea volviendo de una caminata o retornando de una meditación profunda, escribe tu experiencia en el diario. Esto es esencial. No te conviene depender de tu memoria en un asunto tan delicado. Los sueños y la meditación pueden ser muy esquivos, y como el viento, pueden desvanecerse y desaparecer. Es importante registrar nuestras experiencias al respecto, así nuestra mente podrá digerir luego los sucesos relacionados con nuestro tótem animal. Escribirlos también nos permite tener un punto de referencia al determinar las características de nuestro animal, y nos ayudará a interpretar los mensajes que nuestro animal está comunicándonos.

6. Anotar cada detalle; por ejemplo:

  • ¿Qué hacía tu animal cuando lo viste? ¿Volaba? ¿Nadaba?
  • ¿Cómo se veía exactamente? ¿Sano? ¿Enfermo?
  • ¿De qué color era? ¿Natural? ¿Inusual?
  • ¿Cómo era el entorno? ¿Boscoso? ¿Desértico? ¿Estaba en aguas tenebrosas?

7. Tomate un descanso. Después de un tiempo, algunas horas, o un día –vuelve al diario de tu tótem animal y lee con atención lo que escribiste en él. Comienza la búsqueda de tu animal que se revele o presenta. Sigue uniendo las características similares, junto con otros detalles asociados con la aparición de tu animal durante el sueño o la meditación. Eventualmente, comenzarás a unir las partes de un hermoso “tapiz” de profundo entendimiento de ti mismo, tu vida y tu realidad.

8. Repite este proceso para percibir los continuos mensajes y una comprensión más profunda de quien eres.

Siguiendo estas indicaciones, irás fortaleciéndote en tus habilidades interpretativas, confiando más en tu intuición y trabajo conjunto con tu tótem animal. Más adelante, a medida que crezcas en este proceso, los espíritus animales se mostrarán así mismos con más frecuencia, a medida que sientan tu confidencia así como y respeto por su presencia.

Por favor, no te desalientes si los animales no aparecen a tu convocatoria las primeras veces. Esto es un proceso, y como cualquier otro proceso, tomará un poco de tiempo y paciencia poder lograrlo.

Sé minucioso, y sabe que el espíritu de tu animal está tan deseoso de comunicarse con vos como tÚ con él.

Te sugiero que tampoco te enredes en el proceso de esta guía. Si encuentras un mejor proceso para identificar o contactar a tu tótem animal, ¡úsalo! Esta es solamente una guía para una experiencia muy personal. En última instancia tú eres la única persona llamada a hacer el intento.

Finalmente, este proceso es cooperativo. Debemos respetar el espíritu del mundo animal, invocando humildemente a nuestro animal a presentarse ante nosotros, y agradeciéndole cada vez que lo haga.

Bien, mis queridos amigos, creo que por ahora podemos dejarlo aquí, para que ustedes vayan incursionando en estos aspectos y puedan realmente sentir la energía de nosotros los animales. Nos encontramos en la próxima; saludos de la Hormiga y Azton.